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Un cuerpo desnudo acostumbrado a largas sesiones de pintura, forjado en el paciente arte de posar. Así transcurren los días de Rodolfo Muñoz del Río desde hace más de 70 años cuando, por equivocación, pisó la Escuela Nacional Superior Autónoma de Bellas Artes del Perú (ENSABAP) en busca de trabajo como bibliotecario y con el afán de acercarse al mundo del arte.

Aunque sus padres nunca supieron de su trabajo, éste lo ha llevado a convertirse en uno de los modelos de arte más antiguos del mundo y en una leyenda viva gracias a su dedicación y constancia. A sus 85 años, Rodolfo Muñoz, sigue trabajando como modelo de la ENSABAP y busca alcanzar el récord guinness.

El arte de posar

Las poses de Muñoz han inspirado innumerables trazos y esculturas de los más reconocidos artistas plásticos peruanos como Víctor Humareda y de la llamada “Promoción de Oro” entre los que se incluye a Tilsa Tsuchiya y Gerardo Chávez.

 

Este proyecto explora la vida y labor de Rodolfo Muñoz. Pretende acercarnos al uso de su cuerpo como una herramienta de trabajo e inspiración para jóvenes artistas. Dentro de una sociedad que cada vez valora más la eterna juventud y desplaza a los adultos mayores, este proyecto busca reflexionar sobre la vigencia de sus aportes y el aprecio por la pluralidad de cuerpos en las artes visuales.

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